El encordado es uno de los priciples elementos de nuestra raqueta de tenis. Sus características más relevantes que diferencian cada tipo de cuerda, nos servirán para optimizar el rendimiento de nuestro juego.
Existe hoy en día una ámplia gama de cuerdas disponibles en el mercado, variados tipos y precios que nos entregan diferentes prestaciones al momento de interactuar con ellas.
Dentro del gran mundo de las cuerdas, podemos encontrar cuerdas más gruesas y cuerdas más finas. Un encordado de mayor grosor nos aporta mayor durabilidad, mientras que un encordado delgado puede generar mayor fricción, por consiguiente, mayor control y efecto.
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Es un factor de vital importancia, puesto que va a influir directamente sobre el control y la potencia. Una mayor tensión (expresada en kilogramos o libras) va a proporcionarnos una mayor sensación de control pero menor potencia. Sin embargo, a medida que la tensión disminuye, las cuerdas despiden más y, por tanto, vamos a lograr que la pelota avance con mayor velocidad sin necesidad de tanto esfuerzo. En los torneos ATP y WTA, podemos encontrar de todo, desde jugadores como Volandri o Kukushki que juegan con tensiones de 25 libras, y por otro lado jugadores como las hermanas Williams, que juegan con tensiones cerca de las 70libras. Dentro del circuito el promedio está en unas 53 a 55 libras, aproximadamente”.